Por Yeltzing Rostrán A.
Santa Martha es una comarca del municipio de Acoyapa, de donde han salido muy buenos lanzadores, los cuales han destacado en el béisbol de Primera División: Apolinar García, quien persigue el récord de más partidos salvados, el cual está en poder de Jacinto Carrero, y, Erasmo Reyes que está con 78 victorias incluyendo las de esta temporada. A este grupo, también debo integrar a Ángel Canales, el prospecto que más rápido ha evolucionado. Pero nadie vaticinó que de allí saliera el más grande pícher de los Toros y de Chontales: José David Rugama.
En el 2009, cuando dio inicio la segunda etapa del campeonato de béisbol de Primera División, José Rugama viajó de Acoyapa hacia Juigalpa en busca de una oportunidad con los Toros. Esta decisión, seguramente la tuvo que haber pensado, porque significaba dejar a su familia para venir a los entrenamientos. ¿Imaginaría Rugama que abandonar su tierra lo convertiría en el mejor lanzador de Chontales? Mientras no comencemos a ver los resultados, todo es incertidumbre. No sabemos qué va a pasar. No creo que José David haya pensado que siendo pitcher, conquistaría la gloria.
En la temporada de debut con Chontales, a Rugama no le fue bien. En 13 juegos iniciados ganó uno y perdió nueve, agregándole la derrota que sufrió vistiendo el uniforme de la Costa Caribe como refuerzo.
Claramente estos números no son buenos para un lanzador que tuvo una efectividad de 4.07 en 84 innings. Sin embargo, a José no le faltó las fuerzas, tampoco desistió. Rugama sabía que el talento lo tenía, pero había que seguir trabajando para construir la grandeza.
En su trayectoria de 12 años por el béisbol de Primera División, Rugama ha lanzado tres juegos sin hit: a la Costa Caribe en 2010; Boaco 2012 y Zelaya Central en 2016. Un juego perfecto a San Fernando en el 2018 y el récord de más entradas lanzadas sin permitir carreras de 47.
Si algo le faltaba en su palmarés a José David para alcanzar la gloria y convertirse en el mejor pícher de Chontales, este sábado lo logró frente a Matagalpa lanzándoles cinco innings de cinco imparables, una carrera y siete ponches. Rugama ganó su juego 100 en su carrera, en su estadio, con su público que lo convirtió en el segundo chontaleño con más triunfos y en el número 21 de los lanzadores que han logrado esta cifra en el béisbol nacional. El acoyapino Germán Espinoza ganó más que él 106.
A sus 41 años de edad, lo que le queda a José David es pensar en el retiro de una gloriosa carrera, pero en vista de que hay otro récord por alcanzar, no creo que eso vaya a suceder. ¿Será que después de este año seguirá en el béisbol como jugador activo y buscar alcanzar el registro de 1,000 ponches? Rugama está con 876 ponches y sería otra hazaña, la cual la conforman sólo 11 lanzadores.