Tomado del Diario La Prensa.
Mientras en Nicaragua los obispos instaron a los ciudadanos a mantener la fiscalización de la mesa negociadora con el régimen de Daniel Ortega y la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, el papa Francisco animó “a las partes a encontrar una solución pacífica lo antes posible para el bien de todos”.
Francisco dijo estas palabras inmediatamente después del rezo mariano del Ángelus, en el Vaticano, Roma. El papa indicó que desde el 27 de febrero Nicaragua mantiene “importantes conversaciones para resolver la crisis política del país que ya tiene más de 11 meses”.
En Nicaragua los obispos de la Conferencia Episcopal, el cardenal Leopoldo Brenes y el auxiliar de Managua, Silvio Báez, calificaron el mensaje del papa como “esperanzador para que haya frutos auténticos para la paz, la democracia y la libertad de Nicaragua”. Así como también este pronunciamiento muestra la “cercanía que Francisco tiene con el pueblo nicaragüense”.
Sin embargo, ambos obispos instaron a los negociadores y a la ciudadanía a que fiscalicen el proceso de negociación para que exista un diálogo sincero y sin pactos debajo de la mesa. El cardenal Leopoldo Brenes dijo que siempre es importante platicar y sobre todo cuando hay un diálogo con sinceridad. “Siempre y cuando no se haga nada por debajo de la mesa, siempre y cuando se dialogue con sinceridad. Y sobre todo que no se busquen prebendas personales, del partido o de una representación social”, agregó.
El cardenal dijo que el diálogo no debería servir para que una parte aplaste al otro, sino para que se “escuchen las mejores ideas y se tome la mejor opción para el bien común de la comunidad”. En esa línea, monseñor Báez instó a la ciudadanía a que fiscalicen el diálogo para que “no se enferme, no se desvirtúe” y para que dé frutos de justicia, libertad y paz para el país. “Tampoco puede ser un diálogo que encubra las voluntades de los más poderosos que podrían estar detrás. Para que no haya pactos ocultos a las espaldas del pueblo”, aseguró.
No obstante, Báez aclaró que no se debe dejar morir el diálogo. “En este momento, o dialogamos o nos destruimos todos”, agregó. Sobre el mensaje del papa, Báez aseguró que este demuestra que Nicaragua es importante para su santidad. “Por lo que a mí me consta y por lo que ha dicho, el papa Francisco, en modo silencioso pero eficaz, ha estado muy cerca de la problemática nicaragüense en estos meses”, dijo Báez, y agregó: “Ama a este pueblo con especial predilección. Y le damos gracias. Sabemos que su oración y la de nosotros, hará muy fecundo este momento que parece muy difícil”.