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Juigalpa-Chontales: Aunque Nicaragua está libre del Gusano Barrenador desde 1998, algunos productores no han escondido sus preocupaciones con el surgimiento de casos en la vecina del sur Costa Rica y eso, los ha impulsado a adoptar medidas profilácticas en su ganado.
Freddy Álvarez, un productor chontaleño con propiedades en Rio San Juan, manifestó, que los casos detectados en Costa Rica, les obliga a mantenerse en alerta junto al personal de las fincas quienes se dedican a inspeccionar el ganado y si presentan heridas o algo sospechoso tomarán medidas a lo inmediato.
“Gracias a Dios en Nicaragua no registramos ningún caso de Gusano Barrenador, pero, además, debo reconocer la fuerte vigilancia del Ejército en la frontera sur para detectar movimiento de ganado y eso como productores nos da seguridad, porque no muy fácil llegará a nuestras fincas el contagio”, dijo el señor Álvarez.
Por su parte, el doctor y productor Lenin Álvarez, propietario de la ganadería “Gracias a Dios” ubicada en los Laureles-Nueva Guinea-Zelaya Central, planteó como primera medida, estar pendientes de las heridas que presenten las reses porque esa es la puerta de entrada de la mosca que posterior, se convierte en larva.
De acuerdo al doctor Álvarez, el personal de las fincas tienen bastante experiencia alrededor del tema y a su criterio, si hay algo sospechoso se debe informar a los técnicos del IPSA para que lleguen y realicen la respectiva inspección y así, evitar casos del Gusano Barrenador.
El Gusano Barredor es una enfermedad causada por la larva de la mosca (cochliomyia hominivorax), afecta a animales domésticos y a los humanos, la larva se alimenta de tejidos vivos. La infestación se da cuando la mosca deposita sus huevos en una herida fresca, las larvas eclosionan entre 12 y 24 horas después.