Tomado del Periódico Hoy.
El Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific), por medio del acuerdo ministerial 017-2019, ordenó que a partir del 25 de julio, productos como las sardinas enlatadas, sopas preparadas, jabón de tocador, desodorantes corporales y antitranspirantes, lámpara de mano, cepillo de dental, guantes plásticos y guantes de caucho comiencen a pagar el Impuesto al Derecho Arancelario de Importación (DAI), cuya tasa oscila entre el 5 y 15 por ciento.
Esta medida del régimen de Daniel Ortega afecta directamente a los consumidores que ven reducido el poder adquisitivo. La decisión de clavar con el DAI a estos productos fue adoptada en silencio por el Mific, debido a que Ortega necesita recursos para afrontar la caída de la recaudación como consecuencia del impacto de la crisis política en la economía.
Otros productos que fueron afectados por la medida son los aceites refinados de soya, maní, oliva, palma, girasol, de algodón, de coco, de almendra y maní, que ahora en lugar de pagar cinco por ciento se les aplicará un impuesto que oscilará entre 10 y 15 por ciento, según el tipo de aceite.
En la normativa se establece que los productos que aún quedan gozando de exoneración (harina, pastas alimenticias, avena, cebadas, cera vegetal) mantendrán su vigencia hasta el 31 de diciembre de este año, lo que implica que si luego de esa fecha no se renueva la disposición comenzarán a pagar este impuesto.
Este impacto se suma al fuerte golpe que tuvo la reforma a la Ley de Concertación Tributaria, la cual gravó con el 15 por ciento de Impuesto al Valor Agregado (IVA) a bienes de uso para el hogar como papel higiénico, jabones de lavar y baño, detergente, pasta y cepillo dental, desodorante, escoba, cerillos o fósforo y toalla sanitaria de producción nacional.