Juigalpa-Chontales: Fueron sepultados en el cementerio de El Coral-Chontales, los restos de Carlos Enrique Rosales García, el nicaragüense que falleció el pasado 27 de septiembre en Wisconsin-Estados Unidos, producto de un fulminante paro cardiaco y desde ese momento los familiares comenzaron a recaudar entre la población la suma de 15 mil dólares que era el valor para repatriar el cuerpo.
El féretro ingresó a Juigalpa a la una de la tarde del domingo 29 de octubre y encabezaba el recorrido un auto parlante que consolaba a los dolientes con cantos cristianos, además, motociclistas que se unieron en el empalme Las Lajitas y posterior, se dirigieron a la iglesia adventista donde permaneció un poco más de dos horas.
Adrián Rosales García, hermano del infortunado joven, expresó en la entrada principal del templo el agradecimiento a aquellas personas que dieron su contribución para que el cuerpo sin vida de Carlos Enrique, se le diera cristiana sepultura en su departamento.
Lograron reunir los 15 mil córdobas
“Como familia ya nos sentimos bastante bien porque se logró el objetivo, en primer lugar, reunir los 15 mil dólares y traerlo de Estados Unidos a su departamento natal. Ese era nuestro anhelo traerlo a su patria y darle el último adiós en El Coral”, declaró Rosales García.
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Para recaudar el dinero que solicitaba la funeraria, los miembros de la familia y amigos recorrieron la mayoría de los municipios de Chontales solicitando el aporte económico de las personas de buen corazón y aunque parecía una misión imposible, lograron reunir los 15 mil dólares.
De acuerdo a Adrián, su hermano iba a cumplir un año de estar en Wisconsin-Estados Unidos y como familia desconocían que Carlos Enrique tenía padecimientos cardiacos. Su viaje tenía como objetivo trabajar fuerte, pagar la deuda y buscar la manera de salir de la pobreza en la que viven.