Por Marvin Miranda.
Punto Noticioso.Com
El ingeniero Wilmer Antonio Fernández Vargas, presidente de Canislac, afirmó, que en comparación al año pasado registran un descenso del 32% en valores y un 23% en volumen, augurando un mal cierre del sector lácteo debido a la crisis sociopolítica que envuelve al país desde el 19 de abril y atrás quedaron las proyecciones que se habían trazado.
Según el dirigente, para el 2018 se proyectaron crecer un 5% en comparación al año pasado, pero no sólo la situación política sacude a los finqueros. También las barreras impuestas por los socios comerciales (El Salvador y Honduras). Este último país tiene más de 2 años de no comprarle a Nicaragua ni un solo litro de leche.
Otro mercado que está deprimido, es el venezolano y reportan cero exportaciones de productos derivados de la leche. Asimismo la dirigencia de Canislac explora una variedad de destinos donde se pueden comercializar los lácteos nicaragüenses, como Guatemala y México.
Fernández Vargas aseguró, que las bajas exportaciones no han incidido negativamente en la producción de leche, al contrario hay un aumento significativo y además, están entrando a la temporada de parición del ganado lo que abonará a un mayor crecimiento.
Ya están finiquitando los directivos de la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo, una gira a República Dominicana y desde hace algunas semanas sostienen reuniones en la embajada de esa nación acreditada en el país y para eso, trabajan en el mejoramiento de los sistemas de producción vinculados a la transformación industrial.
Admitió el ingeniero Wilmer Antonio, que Nicaragua por el momento está enmarcada en dos productos de altos volúmenes de exportación, en este caso el quesillo y queso morolique, siendo la meta de los directivos de Canislac abrir los posibles nichos de mercados con otros lácteos de mayor valor agregado.