Fe y piedad popular.

Punto Noticioso.Com
Peregrinos de todas las edades caminaron desde Juigalpa hasta la parroquia de Acoyapa, para pagarles sus promesas a San Sebastián por favores recibidos. Unos fueron curados de enfermedades terminales, otros salieron de la cárcel y el resto por variedad de milagros.

Los promesantes comenzaron a caminar desde las 2, 3, 4 y 5 de la tarde de este martes 19 de enero y durante los 32 kilómetros que hay de Juigalpa a Acoyapa, se encontraban con personas que todos los años reparten entre los creyentes café, agua y algunos entregan refrigerios.

Uno de los fieles a San Sebastián, que sólo se identificó con el nombre de Gustavo, relató a Punto Noticioso, que caminará mientras Dios lo tenga con vida, porque la milagrosa imagen lo ha protegido de una serie de intervenciones quirúrgica a las que ha sido sometido.

Cada 19 de enero y este año no fue la excepción, en la casa de don Heyze Alvarado, ubicada en la Palma, a los promesantes les entregan alimentos y refrescos. Según el benefactor, preparó más de 4 mil servicios de comidas y a cada participante se le da una ración como parte de la promesa de su esposa.

Alvarado reconoció, que previo al cumplimiento de la promesa, su esposa quiso detener la actividad por precaución al coronavirus y al final, bajo la protección de San Sebastián decidieron preparar los alimentos y dárselos a los peregrinos con mucho amor.

A eso de las 9 de la noche los primeros peregrinos de Juigalpa, Santo Tomás, San Pedro de Lóvago, Villa Sandino y Rio San Juan, comenzaron a llegar a la parroquia. Uno de los primeros que pagó su promesa, fue José Álvarez, quien logró sobrevivir a varios infartos cardiacos y le pidió su sanidad a San Sebastián.

“Estoy emocionado, San Sebastián me tiene vivo y he venido a pagarle ese milagro, porque me salvó de varios infartos y hoy, mi corazón está sano. No me canso de darle gracias a Dios y San Sebastián”, dijo Álvarez, después pasar varios minutos postrado a los pies de la imagen milagrosa.

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