Tomado de Nicaragua Investiga.
La angustia y la zozobra se incrementa a medida que pasa el tiempo. Los fuertes vientos del huracán ETA están comenzando a causar estragos en las frágiles viviendas ubicadas en Bilwi, capital de la Región autónoma de la Costa Caribe Norte de Nicaragua donde se tiene previsto el impacto del fenómeno atmosférico.
El huracán ETA, que se convertirá en categoría 5 antes de tocar territorio nicaragüense la madrugada de este martes, según advierte el Centro Nacional de Huracanes, ha dañado la iglesia católica San Pedro, así como viviendas de personas particulares. También el huracán ha tumbado árboles, previo a su llegada, informó el reportero Gilberto Artola, director del medio URACCAN Siuna.
Nelson Geovanni es un ciudadano habitante del barrio Arlen Siu, en Bilwi, Puerto Cabezas. Geovanni relata vía telefónica a NICARAGUA INVESTIGA que los vientos se arreciaron tipo 12 de la noche y terminaron levantando parte de las láminas de zinc de su casa. «No he podido salir afuera porque hay árboles caídos y zinc por todos lados», señaló.
La situación hasta el momento es tensa y las autoridades han continuado evacuando de último momento a personas que se encontraban en situaciones de vulnerabilidad. De acuerdo con la última conferencia de prensa brindada por el Sinapred la noche de este lunes, al menos seis mil familias se encontraban evacuadas por el impacto del huracán.
Los sitios de albergue improvisados de último momento por el gobierno son iglesias, escuelas las cuales se encuentran atestadas, y sin ninguna medida preventiva por el nuevo coronavirus.
Hasta la 1:00 de la mañana de este martes 3 de noviembre, el huracán ETA se encuentra en categoría 4, y con fuertes pronósticos de convertirse en 5 tras su llegada a Bilwi. En su último reporte el Centro Nacional de Huracanes advirtió que ETA es «extremadamente peligroso».
El Caribe Norte y el Triángulo Minero se mantienen en alerta roja; la alerta amarilla está activa para Jinotega, Nueva Segovia, Chinandega y la alerta verde para el resto del país.