José Adán Solís: “Me gusta tanto la radio…que sigo locutando”.

Por Marvin Miranda.
Juigalpa-Chontales.
Cuando uno habla de la radio difusión de Chontales, es inevitable hacer mención de José Adán Solís, el popular Charanga, quien a la edad de 14 años por invitación de un amigo que más adelante se convirtió en su compañero de trabajo, llegó por primera vez a la única emisora que existía en Juigalpa.

“Yo me acuerdo que en 1972, le pedí a mi (vecino) Bismarck Rodríguez, me hiciera el favor de llevarme a la radio Ondas Chontaleñas y su propietario era don Hernaldo Rizo. Después de mi primera visita seguí llegando y conocí a Wilmor León, quien era en ese entonces el ofiboy de la radio”, recordó José Adán.

A pesar que Charanga no tenía ninguna responsabilidad en esa radio, siempre salía a las 9 de la noche una vez que cerraba transmisión con el programa de música instrumental de una empresa llamada la Proveedora del Hogar y es así, que el propietario de la emisora le da la oportunidad de aprender a controlar.

Según José Adán, aprender a controlar no era muy fácil por la ausencia de la tecnología y en ese tiempo, se utilizaban los famosos tornamesas donde ubicaban los discos de acetatos, los carretes y cartuchos. Para hacer uso de estos equipos se necesitaba en primer orden, cálculo para localizar los comerciales y la música.A los 10 días de estar en el aprendizaje, al locutor estrella de la radio, Bismarck Rodríguez, se le enfermó la esposa y eso se convirtió en una excelente oportunidad para José Adán Solís. Ese día asumió el turno de las 7 a las 9 de la noche y en medio del nerviosismo logró llenar las expectativas de don Hernaldo Rizo.

Reconoce Charanga, que incursionó a la radio difusión por curiosidad y con el pasar de los días le fue gustando hasta quedarse sin poder salir. “Me gusta tanto la radio que a mis 60 años sigo en Radio Centro locutando mi programa Charanga Campesina”.De acuerdo a la historia, los primeros locutores de radio oriundos de Juigalpa, son Wilmor León García, ya retirado y ahora dedicado a su negocio y José Adán Solís, mientras Bismarck Rodríguez y su hermano Juan Carlos, son salvadoreños, pero nacionalizados en Nicaragua, se acantonaron en Estelí y luego, con ayuda de don Ramón Barrante llegaron a esta ciudad.

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