Por Marvin Miranda.
Punto Noticioso.Com
Bajo un ambiente caluroso y en ciertas oportunidades, alguna que otra garuba, los fieles católicos celebraron el 39 aniversario de la última aparición de la Virgen al vidente Bernardo Martínez y en esta oportunidad, la solemnidad fue presidida por monseñor Carlos Enrique Herrera Gutiérrez, obispo de la Diócesis de Jinotega.
Herrera Gutiérrez fue párroco de San Francisco de Cuapa a finales de los años ochenta y se hizo acompañar de algunos franciscanos que en su momento fueron los guías espirituales de los pobladores de ese lugar bendito que sorprendió al mundo, cuando la reyna del cielo se le presentó a Bernardo Martínez en 1980.
Muchos de los presentes llegaron a pagar promesas por favores recibidos. Uno de ellos fue Gustavo Arana, quien entre los asistentes distribuyó alimentos como una forma de agradecimiento por las bendiciones que Dios a través de la Virgen le ha concedido.
“He venido con mucho amor a compartir estos alimentos aquí al (Santuario de Cuapa) y al terminar cada obra benéfica que realizo junto a mí familia, me siento gozoso de haber compartir con las personas un aliciente”, dijo Gustavo Arana, al momento de distribuir un poco más de 200 platos de comida.
Por su parte, el padre Almer Moncada, rector del Santuario de las Apariciones, calificó de muy importante la celebración del 39 aniversario de la última manifestación de la Virgen a Bernardo Martínez y es la feligresía, la que patentiza este acontecimiento con su participación a cada actividad que ahí se organiza.
Manifestó, que los fieles llegan al lugar donde la Virgen se le apareció en cinco ocasiones a Bernardo a escuchar el mensaje que siempre es vivo y actual. “Sí en Nicaragua hubiese paz, no existieran tantas injusticias, tantas perturbaciones en las familias nicaragüenses, ni tanta migración y en realidad, estamos necesitados de paz”, concluyó.