Tomado del Diario La Prensa.
Al menos cuatro personas murieron este miércoles en un asalto ocurrido al mediodía en Bocana de Paiwas, Caribe Sur de Nicaragua. El hecho ocurrió cuando sospechosos que se movilizaban en motocicletas sin placa incursionaron en el poblado.
La intención era supuestamente robar en la vivienda de una productora, pero los moradores junto con vecinos se defendieron. Según los vecinos, uno de los sospechosos llevaba puesta una gorra de la Policía Nacional, otro calzaba botas tipo militar.
Los hombres se dirigieron a la vivienda de Urcinia Orozco, a quien exigieron que les entregara las armas que tenían en casa y dinero. Al estacionarse frente a la casa de Orozco, los hombres les pidieron que les abrieran la puerta.
“Venían enchaquetados, hay uno que andaba con gorra de policía”, explicó Leonel Ortiz, un vecino de la zona. Los hombres “simplemente le dijeron a la señora que estaba allí que entregaran el arma y el dinero que tenían”, comentó Ortiz.
La reacción del yerno de la propietaria de la casa, identificado como Raúl Miranda, fue disparar contra los desconocidos. Sin embargo, los hombres también reaccionaron accionando sus armas de fuego “y le pegaron dos balazos”, aseguró el informante.
“Hubo un cruce de bala”, señaló el lugareño, quien indicó que dos de los disparos impactaron a Miranda por la espalda con heridas de gravedad, por lo que fue conducido a la unidad de salud de la zona, pero según informaciones posteriores, falleció a causa de las heridas.
“Luego la población armada se trenzó a balas con ellos, los encerraron en una casa y en el cruce de balas fallecieron tres de los cuatros que vinieron en las motocicletas y uno salió corriendo a la bocana del Río Grande de Matagalpa y se lanzó a este huyendo; no se sabe, él va herido, según las huellas”, narró el testigo.
La vivienda de Orozco, una fuerte ganadera del sector, está ubicada en el centro de la localidad, cerca de la filial de la Alcaldía de ese municipio. El hecho mantiene sorprendida a la población de Bocana de Paiwas, sobre todo porque pasó a plena luz del día.
La comunidad en los últimos días vivía en una aparente calma. Es de resaltar que la delegación policial y las oficinas administrativas están ubicadas en Ubú Norte. “Esto no sucedía aquí”, manifestó un vecino de Paiwas, quien presume que los hombres proceden de Río Blanco, de acuerdo con el sector por donde ingresaron.