Por Mayra Mercedes Suárez.
Punto Noticioso.Com
Inspirada por la influencia de su mamá y el trabajo honrado, la joven María José Madriz se ha convertido en una importante referencia entre la población de San Francisco de Cuapa, un municipio que apenas da sus primeros pasos en el desarrollo económico, donde los jóvenes tienen el reto más grande.
María José es estudiante de Ingeniería en Sistemas pero desde los 15 años inició colaborando en el trabajo de su mamá: la pastelería, una actividad única en el municipio, desde entonces pasó de ser ayudante a trabajar de “hombro a hombro” con su progenitora, ha recibido varios cursos y ahora no solo elaboran o decoran pasteles, también incursiona con una variedad de postres y dulces.
“Emprender tiene una gran cantidad de dificultades, tengo la ventaja que ya llevamos varios años trabajando y por lo tanto hemos adquirido poco a poco los utensilios o electrodomésticos como batidora y horno; además nos vamos enfrentando a un mercado exigente, por ser productos gastronómicos se mide el sabor, la presentación y por supuesto el precio”; añade.
Afirma que Cuapa ha respondido positivamente a su oferta, se está haciendo común dejar en sus manos la elaboración de bocadillos y postres variados para eventos, además diario elaboran variedad de productos con tan buena aceptación, que el mismo día se vende. A pesar de su éxito, no piensa dejar su carrera, perfilándose como una ingeniera-pastelera.
La tecnología ha sido otra de sus aleadas, a través de las redes y algunas estrategias de publicidad, sus productos antojan a sus seguidores (que también son parte de la clientela). En la entrevista mencionó varias pautas que podrían inspirar a otros jóvenes que están liderando un negocio, entre ellas: capacitarse y perseverar a pesar de las negatividades de los demás.