Situación económica de Cuba obligó a la iglesia suspender la Jornada Nacional de la Juventud.

Tomado del Nuevo Herald.
La II Jornada Nacional de la Juventud que la Iglesia católica de Cuba proyectaba para agosto se convirtió en la más reciente víctima de la crisis económica. Los organizadores no han podido conseguir los alimentos y el transporte necesarios para reunir en Santiago de Cuba a los centenares de jóvenes que esperaban congregar y, en su lugar, han decidido que el evento se celebre simultáneamente en parroquias de toda la isla.

“En los últimos meses, las condiciones económicas han cambiado sustancialmente afectando, de una manera u otra, muchos ámbitos de la vida nacional”, explicó Dionisio García, arzobispo de Santiago de Cuba, en una carta dirigida a los fieles este lunes.

García detalló que el contexto económico que vive la isla “crea incertidumbre y preocupación en no pocos” e indica que “la subida de precios y escasez de muchos artículos y la limitación de servicios, principalmente el transporte”, hacen que la jornada sea “prácticamente irrealizable según como se había preparado”.

Esta Jornada nació el pasado año como versión cubana de las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) y en 2019 iba a ser la continuación de la JMJ de Panamá. En este encuentro religioso se realizan viacrucis, catequesis, eucaristías, vigilias y fiestas que se continuarán haciendo pero, en este caso, en cada provincia.

Deja una respuesta