Por Marvin Miranda.
Punto Noticioso.Com
Para el presidente de la cooperativa Cristo Rey, Evelio Raquel Trujillo Romero, es prematuro medir los posibles daños que provoque la irregularidad del invierno en la siembra de primera y a su criterio, las dudas se despejarán a finales de julio o en la primera quince de agosto cuando salga la cosecha.
“El invierno es variable, puede que hoy no llueva y mañana se registre un aguacero o puede pasar lloviendo tres días. Ahorita no existen los elementos suficientes para evaluar posibles afectaciones y para no herrar, mejor esperemos un poco”, dijo el dirigente gremial.
Previo a la instalación de la temporada lluviosa, Trujillo Romero había vaticinado un invierno irregular y en esa oportunidad, exhortó a los labriegos a no sembrar luego de las primeras precipitaciones, sino, hasta después del 15 de junio, sin embargo, algunos se aventuraron y lo hicieron.
La misma recomendación hizo el ambientalista Bayardo Saúl Vargas Medrano, quien aseguró una temporada débil en su inicio y les dijo a los agricultores no sembrar al menos en el mes de mayo porque existía la posibilidad de que las lluvias se estancaran y eso, podría generarles pérdidas en los sembradillos.
Pese a que algunos payeses han expresado preocupación por la irregularidad de las lluvias, los socios de la Cooperativa Cristo Rey aun no la sienten y de continuar así la próxima semana, buscarán la manera de hacerle frente para reducir las posibles afectaciones que pueda surtir la falta de agua.
Una de las alternativas trazadas por los miembros de esa cooperativa, es que sí el invierno sigue irregular, procederán inmediatamente a regar los cultivos y aplicarles urea para reducir posibles daños, por eso, los pequeños y medianos agricultores fueron capacitados antes del inicio del ciclo productivo 2019.